La muerte juntó sus labios con los míos y sentí miedo, y por el miedo sentí frío, pero al mismo tiempo sentí el calor de las llamaradas del infierno recorriendo cada rincón de mi asustado cuerpo...

viernes, 8 de julio de 2011

~Capítulo 5~

Isabelle veia a esa hermosa mujer con cara de odio, como si le hubieran dicho “La persona que amas acaba de engañarte con aquella bella mujer, tu ya no eres nada para el” al ver a Tom notaba un sierto brillo en sus ojos que a ella no le gustaba  pero paso por encima de ellos cuando paso Bill por su lado susurrando:

-creo que alguien esta enamorado no?

Izz solo fingió ignorarlo pero ella muy en el fondo sabia que era verdad

¡Pero Tom nunca estuvo enamorado de mi! Como podía pensar eso como podía  estar tan triste y deprimida por aquella situación si nunc a había sucedido nada.

-              Tocaron la puerta alguien puede abrir!- había dicho Bill

-              Ya voy! –Habia dicho Isabelle

Un  hombre alto ( uno ochenta) de cabello güero como los rayos de sol había aparecido

-              Hola! Soy Andreas- había dicho aquel apuesto hombre enseñando su invitación

-              Ah! Claro pasa!

Tom al parecer se había alegrado de ver a ese chico pues lo abrazo al verlo. Isabelle al terminar de recibir  los invitados subio a su invitación ya que ya que la música había empezado ya y los invitados estaban listos para bailar. Al subir ella había sacado de un cajón, un cajón viejo hecho de caoba con grutas por todas partes un pequeño pero brillante antifaz negro que combinaba con su vestido se arreglo un poco el antifaz y bajo por aquellas largas escaleras. Todos se encontraban bailando con antifaces todos  cada uno de ellos bellos y brillantes, ella parecía buscar a alguien pero en realidad no sabia  exactaente a quien al seguir con su bisqueda encontró a Tom bailando al fondo ero dejo de hacerlo al ver a esa bela chica de cbello negro con antifaz del mismo color, se acercó a ella le beso la mano y la invito  a bailar. Una canción lenta y romántica hacia en ambiente maravilloso y el la pegaba cada vez mas a su calido cuerpo sin dejar de mirarla con esos ojos del color del amancer y esa tez blanca como la nieve que caía esa fina noche.  Se fue acercando cada vez mas a sus labios y la beso con dulzura sintinedo esos calidos labios que al igual que cuerpo ella le correspondio el beso con pasión.

Lo que ellos dos no sabían era que atrás de Tom se encontraba aquella misteriosa chica bella y “agradable” mirándolos sin interrupirlos pero los que estaban a su alrededor sabían perfectamente lo perverso que pensaba en aquel momento.

-              L… lo siento dijo To al dejar de besar a Izz

-              No! No te preocupes

Tom se había ido agrrandole la mano aun sin dejar de mirarla e Izz con un además se despidió enseguida llevando sus manos a sus labios.

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